Parece ser que el autor no sólo se ha "inspirado" en las ilustraciones de Foster, también ha cogido prestado el argumento de la historieta "La condecita Enid y el Príncipe Geraint", publicada en México en 1947.
http://www.pepines.unam.mx/serie/show/id/891
Y ambos autores beben de la obra de Lord Tennyson.
Poca información tenemos del señor Caldas. A estas alturas del año, con el personal deseando vaciar sus billeterasE en regalos para sus allegados, seguimos sin saber si habrá alguna novedad en la imprenta.
Espero que el señor Caldas no se dé por vencido, aunque motivos tenga para ello.
Recientemente he recibido los volúmenes 5 y 6 de las dominicales de Tarzán de Manning. Como el resto de los volúmenes de las páginas dominicales y de las tiras diarias, una edición magnífica, un dibujo excelso y unas historias fantásticas. Si le quema el dinero en el bolsillo y aún no los tiene, le recomiendo encarecidamente que los adquiera sin demora; no se arrepentirá. Saludos.
Parece ser que el autor no sólo se ha "inspirado" en las ilustraciones de Foster, también ha cogido prestado el argumento de la historieta "La condecita Enid y el Príncipe Geraint", publicada en México en 1947.
ResponderEliminarhttp://www.pepines.unam.mx/serie/show/id/891
Y ambos autores beben de la obra de Lord Tennyson.
Muy bueno, bastante curioso...y supongo que poco defendible lo del anonima "artista", que seguro es alguien que nos suena.
ResponderEliminarPoca información tenemos del señor Caldas. A estas alturas del año, con el personal deseando vaciar sus billeterasE en regalos para sus allegados, seguimos sin saber si habrá alguna novedad en la imprenta.
ResponderEliminarEspero que el señor Caldas no se dé por vencido, aunque motivos tenga para ello.
Recientemente he recibido los volúmenes 5 y 6 de las dominicales de Tarzán de Manning. Como el resto de los volúmenes de las páginas dominicales y de las tiras diarias, una edición magnífica, un dibujo excelso y unas historias fantásticas. Si le quema el dinero en el bolsillo y aún no los tiene, le recomiendo encarecidamente que los adquiera sin demora; no se arrepentirá.
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