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miércoles, 6 de febrero de 2013

¿POR QUÉ TARDA TANTO EL NUEVO VOLUMEN DE “PRÍNCIPE VALIENTE” RESTAURADO POR MANUEL CALDAS? ..................................................... o... ¿COMO SE HACE LA RESTAURACIÓN DE LAS PLANCHAS DE “PRÍNCIPE VALIENTE”?


  Desde hace ya muchos meses bastantes personas escriben a Manuel Caldas impacientes por la salida del ochavo volumen de “Príncipe Valiente”, que publicará la editorial uruguaya La Imprenta. Se quejan que no comprenden por qué está tardando tanto. Algunas, inclusive, le echan a la cara que la edición de Fantagraphics tiene ya, en tres años, seis volúmenes publicados. Otras le dicen que, si no hay pruebas de donde reproducir, hay antiguas ediciones que contienen muchas páginas buenas que no exigen más que una pequeña restauración.
  Caldas entonces les explica que la edición de Fantagraphics usa el mejor material que podía existir para hacer casi sin trabajo la mejor edición de todos los tiempos en color (Fantagraphics lo usa… pero sin lograr hacer dicha edición) y que, para su trabajo, las buenas páginas de antiguas ediciones NUNCA son muy buenas y siempre exigen por lo menos 12 horas de restauración.
  Y es que el ochavo volumen es hasta ahora el que envuelve más trabajo, muchísimo más trabajo. Es el primer de los volúmenes para lo cual no se dispuso ni siquiera de una sola prueba. ¡Ni una! Todas las planchas se obtuvieron de viejas ediciones y de páginas de periódico. Cada una de las 104 planchas es el resultado, por decirlo de manera simplista, de una mescla de partes de dos o tres fuentes distintas.
  Aquí tienen un ejemplo (de la plancha 762) de restauración, uno muy simple, en que la tercera imagen se obtuvo de partes de las otras dos.


   La primera imagen es de una edición brasileña de 1991 y la segunda de un periódico americano, de la cual se borró el color lo mejor posible. Cada una de las viñetas contiene elementos buenos que la otra no contiene, y la construcción de la viñeta definitiva se obtuvo usando como base la primera, en la cual se fueron encolando las partes mejores recortadas de la segunda. Básicamente, es así que se hace la restauración de cada una de las viñetas de “Príncipe Valiente”.  Básicamente y explicado simplísimamente, pero por varias razones es necesario mucho tiempo para llegar al resultado final.
  Destaco tres razones:
1- No se pueden recortarse los pedacitos elegidos de la viñeta 2  y encolarlos todos de una sola vez  en la viñeta 1, porque no encajarían en su sitio exacto debido a que tanto en la edición brasileña como en el periódico ambas viñetas sufrieron deformaciones que solo son perceptibles si se sobreponen una a la otra; por eso se encolan uno a uno los pedacitos, algunos estirándolos un poco y otros apretándolos para encajar exactamente en su sitio.
2- Parte de la trama, deteriorada, hay que borrarla y sustituirla por nueva trama (ya sé, ya sé que muchas gente prefiere que se borren todas las tramas y no se las sustituía, pero Caldas piensa como los que prefieren que no se haga eso, además de que las tramas más gruesas no es posible borrarlas y al mismo tiempo dejar intactas las líneas en ellas inmersas).
3- En el ejemplo del cual hablamos se utilizaron solo dos fuentes distintas, pero generalmente se usan tres, siendo la tercera una versión de la página originalmente hecha para los periódicos de tamaño “tabloide” (este fue el material usado en la mayor parte de la antigua edición de Fantagraphics), versión en que muchas veces son visibles líneas que no ven en la versión usada por Manuel Caldas, que es la que se hacía para los periódicos más grandes – del tamaño “standard” –, con tramas de puntos más pequeños.
  Como ejemplo de una restauración en la cual la versión tabloide de una página incluye algo que falta a la versión “standard”, elegí este (de la plancha 827) ,


teniendo las imágenes 1 y 2 el mismo origen de las del ejemplo de arriba, siendo 3 la imagen de la versión tabloide y 4 la imagen restaurada. Se usó como base para la creación de la imagen final la 1, en la cual se encolaron las partes buenas de la 2, pero después fue posible mejorarla con algo de la 3 (la tabloide), como se ve en la parte del rostro de Val oscurecido por el sombrero.
  Fue haciendo esta labor, pocas veces difícil pero siempre demorada, que Manuel Caldas pasó los últimos ocho meses de su vida. Ahora llegó al fin de la restauración de las planchas del volumen y está rotulándolas, para que en dos semanas el libro salga para la imprenta. Si alguien cree ser capaz de ayudarle, y quizá de hacerlo más rápidamente, que dé un paso en frente. Él se lo agradecerá mucho, y los seguidores de la edición de “Príncipe Valiente” en orgulloso blanco, negro y grises también.
Vuestro, 
Leónidas